Moho en Maryland [ES]

Moho en Maryland
Original: Maryland's Bathroom Mold
Translated by: TheGreatTarbolin69

tagshow

1

1

us.png

Intento dormir, pero el moho del baño me sigue hablando.

Ya no recuerdo cómo llegué aquí. Tampoco recuerdo el rostro de mi madre cuando me llevó de Pensilvania a Maryland. Extrañamente, recuerdo la razón, iba a comprar mi primer apartamento, finalmente me estaba mudando a la universidad.

Recuerdo solamente formas vagas, la linda recepcionista, o el amable y viejo propietario. El lugar no era nada lujoso, era bastante antiguo de hecho, pero eso era todo lo que podía pagar aquel entonces.

El olor fue lo primero que me llamó la atención. No era malo, ni repugnante, era extraño. Como cuando hueles el aire de un ático que ha estado cerrado durante años, olía a polvo y a vejez.

La habitación, supondría yo, solía tener papel tapiz de color verde brillante, el cual se degradó con el paso de los años hasta no ser mas que una mezcla de azul y amarillo. La cama era espaciosa, pero estaba húmeda, al igual que lo estaban las sábanas. La puerta a mi izquierda conducía a una pequeña cocina, tenía una modesta estufa y encima de ella, un microondas, el cual todavía contenía trozos de grasa por doquier, por lo cual decidí no indagar más.

Finalmente, justo enfrente de la cama, estaba el baño. Este se asemejaba a un animal muerto, no en el sentido de que oliera mal, sino en el sentido de que el baño, fuese un animal, estaría actualmente en las últimas etapas de descomposición. La bañera estaba agrietada y algunas partes estaban verdes, el inodoro también estaba agrietado y el fondo parecía permanentemente manchado de naranja, sin importar cuántas veces intenté tirar de la cadena.

Pero algo más me llamó la atención, algo que no importaba cuánto lo intentara, no podía sacarme de la cabeza. En una esquina del baño, escondido entre el inodoro y el lavabo, había un rincón completamente lleno de una pegajosa sustancia negra, que solo pude asumir era moho.

No recuerdo cuánto tiempo me quedé mirándolo, pero había algo tan cautivador, algo tan oscuro, tan extraño en él, que no podía forzarme a mirar hacia otro lado. Noté muchas cosas mientras miraba, había bichos en el baño, inclusive una araña, pero todas parecían evitar el moho, y cuando trataba de pestañear pude jurar que lo vi ondeando, moviéndose, como la imagen en un borroso VHS.

Cuando volví a mis sentidos ya era tarde en la noche, me sentía cansado y decidí que el mejor curso de acción sería dormir y ocuparme de todo mañana.

Había un extraño silencio en la habitación, sin autos, sin pájaros, sin viento. Pero sin embargo, no podía dormir, quería cerrar los ojos, pero me era imposible.

Porque la misma imagen volvía a mi mente una y otra vez, la imagen de esa masa negra en el baño.

Pasaron cuatro horas y mi cerebro comenzaba a fallar, se negaba a dejarme entrar en los sueños que tanto deseaba, pero también se negaba a seguir funcionando. Miré alrededor de la habitación y la forma de los objetos que una vez conocí comenzaron a mezclarse con el fondo. Podía escuchar voces… no, música, estaba escuchando música. Sonaba como música clásica, pero algo estaba mal, las notas no coincidían, la letra era solo otro ruido más entre el sonido, y todo parecía romperse, como si la canción se estuviera muriendo.

La música seguía haciéndose más y más fuerte, y es como si la realidad se distorsionara y contorsionara con su ritmo. A veces, entre la niebla que era el reino de mi visión, podía ver la puerta del baño abierta y, desde adentro, me miraba.

Traté de taparme los ojos, pero mis manos se volvieron transparentes, traté de esconderme en sábanas que ya no me cubrían.

Me habló, me dijo que no me iba a hacerme daño, que no estaba allí para hacerme herirme.

Su abrazo cubrió todo mi ser.

Su tacto era suave y húmedo.

Poco a poco me volví parte de esa cosa, mis recuerdos comenzaron a desvanecerse, a huir, asustados de lo que les pudiera pasar.

Mi cabeza estaba casi cubierta, me costaba respirar, me era difícil pensar, pero podía hablar.

Llamé a mi madre, asustado.

"No me quiero ir"

Sentí sus brazos alrededor mío, y luego dejé de sentir.


Unless otherwise stated, the content of this page is licensed under Creative Commons Attribution-ShareAlike 3.0 License